Super TC 2000
La Plata
Tenía que ser el "Tano"
Leonel Pernía, se impuso en el round final sobre Agustín Canapino en la competencia del STC 2000 en el Estadio Único de la Plata, y postergó la definición del campeonato.
Tanto en la pista como en la cancha, el Tanito se luce. Y hoy hizo gala de sus dotes como largador, más un auto formidable, para quedarse con la primera edición del Súper TC2000 en el Estadio Único de La Plata, un evento histórico para el automovilismo argentino por sus características. Si ya había logrado el éxito por separado en cada una de ellas, hoy combinó sus dos grandes pasiones y dio la vuelta olímpica para alegría de los hinchas del Rombo.
Esta competencia tenía un aditamento extra, que le puso pimienta a la segunda parte de la misma: la definición del campeonato. En el arranque, si Matías Rossi (Toyota Team Argentina) -puntero del campeonato con 60 unidades de ventaja sobre Pernía- sacaba una diferencia mayor a 67 puntos quedando 66 en juego para las últimas fechas en Mendoza y Potrero de los Funes, se iba de la ciudad de las diagonales como campeón. Sin embargo, la definición se estiró hasta último momento y quedó para San Martín.
Luego de las Mangas 1 y 2, en donde los que aparecían como candidatos puestos en la previa consiguieron su pasaje a la siguiente fase, la definición se puso algo más caliente. En el primer duelo de la Manga 3, Rossi doblegó a Agustín Canapino (YPF Chevrolet), luego Néstor Girolami (Peugeot LoJack Team) hizo lo propio con Facundo Ardusso (Fiat Petronas) y Leonel Pernía (Renault LoJack Team) dio cuenta de Bernardo Llaver (Toyota Team Argentina).
Dado que de estas llaves salían tres semifinalistas, el perdedor con mejor tiempo de vuelta en la ronda anterior clasificaría para completar el escaño faltante. El mismo fue Canapino, y el orden de las semis se definió por sorteo, según lo estipulado en el reglamento particular de la prueba. El azar dictaminó que el de Arrecifes se enfrentaría al Bebu, y que los candidatos al título irían mano a mano.
La tensión se intensificó, ya que si Rossi eliminaba a Pernía y se imponía en la Final se consagraba monarca, pero Pernía podía impedir tal circunstancia si lo dejaba fuera de combate. Mientras Canapa se sacó de encima a Girolami, el Tano ajustició al Misil y lo hizo quedarse con las ganas. El último round era Pernía vs. Canapino.
El tandilense, necesitado de recortar puntos, salió hecho una fiera en el epílogo. Inicialmente el duelo fue ajustado, con Canapino por momentos adelante, pero Leo pudo transitar mejor en la parte final del circuito y aventajó a Agustín. Éste, en su intento por echar el resto para manotear el triunfo, se fue ancho entrando a la recta y se detuvo contra los muretes de plástico antes de la bandera a cuadros.
El festejo desatado era para la gente de Renault, mientras un emocionado Víctor Rosso corría a felicitar a su piloto y Pernía recibía la ovación del público presente de pie sobre el techo de su Fluence. Pese a la derrota, a Canapino también se lo vio muy efusivo en el saludo al vencedor y también se llevó aplausos por su entrega en busca de la victoria.
Por tiempos, el último lugar del podio quedó en manos de Néstor Girolami, y Rossi finalmente ocupó el cuarto puesto. El de Del Viso sigue al frente con 215 unidades en el certamen, y podría gritar campeón en Mendoza el próximo 10 de noviembre. Pernía le recortó y ahora suma 164, siendo 51 los puntos de diferencia entre ambos. Ardusso, cuyas chances son cada vez más remotas es tercero con 132. La definición puede darse en el Jorge Ángel Pena mendocino, dentro de tres semanas.
Fuente: corsaonline
Tenía que ser el "Tano"
Leonel Pernía, se impuso en el round final sobre Agustín Canapino en la competencia del STC 2000 en el Estadio Único de la Plata, y postergó la definición del campeonato.
Tanto en la pista como en la cancha, el Tanito se luce. Y hoy hizo gala de sus dotes como largador, más un auto formidable, para quedarse con la primera edición del Súper TC2000 en el Estadio Único de La Plata, un evento histórico para el automovilismo argentino por sus características. Si ya había logrado el éxito por separado en cada una de ellas, hoy combinó sus dos grandes pasiones y dio la vuelta olímpica para alegría de los hinchas del Rombo.
Esta competencia tenía un aditamento extra, que le puso pimienta a la segunda parte de la misma: la definición del campeonato. En el arranque, si Matías Rossi (Toyota Team Argentina) -puntero del campeonato con 60 unidades de ventaja sobre Pernía- sacaba una diferencia mayor a 67 puntos quedando 66 en juego para las últimas fechas en Mendoza y Potrero de los Funes, se iba de la ciudad de las diagonales como campeón. Sin embargo, la definición se estiró hasta último momento y quedó para San Martín.
Luego de las Mangas 1 y 2, en donde los que aparecían como candidatos puestos en la previa consiguieron su pasaje a la siguiente fase, la definición se puso algo más caliente. En el primer duelo de la Manga 3, Rossi doblegó a Agustín Canapino (YPF Chevrolet), luego Néstor Girolami (Peugeot LoJack Team) hizo lo propio con Facundo Ardusso (Fiat Petronas) y Leonel Pernía (Renault LoJack Team) dio cuenta de Bernardo Llaver (Toyota Team Argentina).
Dado que de estas llaves salían tres semifinalistas, el perdedor con mejor tiempo de vuelta en la ronda anterior clasificaría para completar el escaño faltante. El mismo fue Canapino, y el orden de las semis se definió por sorteo, según lo estipulado en el reglamento particular de la prueba. El azar dictaminó que el de Arrecifes se enfrentaría al Bebu, y que los candidatos al título irían mano a mano.
La tensión se intensificó, ya que si Rossi eliminaba a Pernía y se imponía en la Final se consagraba monarca, pero Pernía podía impedir tal circunstancia si lo dejaba fuera de combate. Mientras Canapa se sacó de encima a Girolami, el Tano ajustició al Misil y lo hizo quedarse con las ganas. El último round era Pernía vs. Canapino.
El tandilense, necesitado de recortar puntos, salió hecho una fiera en el epílogo. Inicialmente el duelo fue ajustado, con Canapino por momentos adelante, pero Leo pudo transitar mejor en la parte final del circuito y aventajó a Agustín. Éste, en su intento por echar el resto para manotear el triunfo, se fue ancho entrando a la recta y se detuvo contra los muretes de plástico antes de la bandera a cuadros.
El festejo desatado era para la gente de Renault, mientras un emocionado Víctor Rosso corría a felicitar a su piloto y Pernía recibía la ovación del público presente de pie sobre el techo de su Fluence. Pese a la derrota, a Canapino también se lo vio muy efusivo en el saludo al vencedor y también se llevó aplausos por su entrega en busca de la victoria.
Por tiempos, el último lugar del podio quedó en manos de Néstor Girolami, y Rossi finalmente ocupó el cuarto puesto. El de Del Viso sigue al frente con 215 unidades en el certamen, y podría gritar campeón en Mendoza el próximo 10 de noviembre. Pernía le recortó y ahora suma 164, siendo 51 los puntos de diferencia entre ambos. Ardusso, cuyas chances son cada vez más remotas es tercero con 132. La definición puede darse en el Jorge Ángel Pena mendocino, dentro de tres semanas.
Fuente: corsaonline
Comentarios
Publicar un comentario